viernes, 9 de enero de 2015

SANGRE EN LA PUERTA


SANGRE EN LA PUERTA

Te recuerdo, Amanda,
ingenuo quijote
cuando el desprecio activa 
el stand by del DEFCOM
de mi adrenalina.
Regalas respeto
y recibes 
tolerancia 0
y todo porque tú sabes 
conjugar el VERBO
que yo soy Dios
y tú eres Dios
y él es Dios ...
Ególatra religión  
de un único
mandamiento
"Te amarás sobre todas las cosas,
y al prójimo
como a Dios mismo"
Reconocimiento que no exige,
en pascuas ni en ramos
pincelada roja 
de sangre en la puerta.